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Mandada a construir en 1902 por el señor Ramón Silva, la más que centenaria Capilla de San Antonio contempla silenciosamente el paso del tiempo desde la vera de la ruta.
Silva había llegado al pueblo apenas unos años antes y habiendo aprendido rápidamente la lengua nativa, colaboraba en la organización de la Fiesta de San Antonio: el Santito de los indios. Fue así que mandó a construir la capilla en terrenos de su propiedad como regalo a los nativos y su santo de devoción.
No obstante, la capilla fue poco utilizada debido a que la creencia de los aborígenes de que el santito quería vivir entre su gente provocaba la misteriosa desaparición del mismo y su aparición en el ranchito.
Posteriormente la capillita sirvió como vivienda de emergencia y como capilla rural.
Se alza unos 3Kms. hacia el norte de la planta urbana, a la vera de la ruta Nº 1.
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Declarada Monumento Histórico Nacional, la Iglesia Santa Rosa de Lima comprende en su existencia el fruto de una rica historia de esfuerzos y espiritualidad.
Fue en 1861 que el Padre Fray Antonio Rossi llegó a estas tierras santafesinas con la orden de iniciar la construcción de templo de Calchines por el que tanto había bregado el Padre Zattoni, por considerarlo el único medio capaz de lograr el afianzamiento. Se sumarían a la propuesta con aportes y trabajo la población, los frailes, y el gobierno provincial y nacional, dando por finalizada la obra en apenas dos años.
El templo se componía de tres naves: la central, destinada a la celebración de la misa, y las laterales, utilizadas para habitación de los padres y el funcionamiento de la escuela pública de niños.
Actualmente descansan en una urna exclusivamente construida en el templo los restos del Fray Antonio Rossi, quien fuera el principal responsable en la concreción de la obra.
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Nacido de la propia comunidad; hecho a esfuerzo de búsqueda y donaciones, el Museo Aníbal Bergallo (Falucho) es, desde agosto de 1994, el único reservorio histórico- cultural de la ciudad de Santa Rosa de Calchines.
Pequeño, casi perdido en el presente de un pueblo que paso a paso se va transformando en turístico, este museo conserva una colección de enseres de los originarios, algunos de los cuales se hallaran en la escuelita de los indios, y otros tantos objetos, en su mayoría provenientes del siglo anterior. Todos donados por los pobladores de Santa Rosa.
Se encuentra ubicado en la intersección de las calles 1ra. Junta y Santa Fe.
Ostentando su apariencia arquitectónica de principios del siglo XX, elegante e imponente, la Estancia Santa Catalina adquiere su importancia y reconocimiento a partir de la década de los ’80, tras haber sido escenario de dos significativas películas nacionales: “La Muerte del Conde”, y “La Noche del Crimen”, producción realizada en conjunto por ATC, Canal 13 de Santa Fe y Canal 5 de Rosario.
La estancia se halla emplazada sobre la Ruta Provincial Nº 1, aproximadamente 8 Kilómetros al norte del centro urbano de Santa Rosa de Calchines.
“Por Los Cerrillos, por las Cuatro Bocas, en las mañanitas rumbo a Cayastá”, entona una reconocida chamarrita que recorre con sus expresiones la costa santafesina. Y es justamente en Los Cerrillos donde aguarda un espacio de singular importancia, principalmente para los aficionados a los deportes.
Allí, en el exacto lugar donde perdiera la vida en un accidente automovilístico el prestigioso boxeador Carlos Monzón, se erige un monumento que lo recuerda y lo homenajea al mismo tiempo.
Se llega hasta aquí desde Santa Rosa de Calchines, continuando hacia el norte por la Ruta Provincial Nº 1.
Paraje donde se concentran fundamentalmente casas de fin de semana, Vuelta del Pirata atrae por su paisaje natural y la tranquilidad característica de los pueblos de la costa.
Llegan hasta aquí principalmente los amantes de la pesca, que encuentran en el arroyo Leyes, un pesquero reconocido no sólo por los locales sino también por toda la provincia y zona de influencia, el espacio ideal para el desarrollo de su disciplina.
Pueden visitarse además -previo permiso de los propietarios-, los campos, invernáculos, y plantas de procesamiento y envasado de hortalizas, donde se aprecia el trabajo diario de la gente de la zona, ya que la horticultura y la floricultura son la base de la economía local.
Paraje ubicado en el sureste de la planta urbana, La Islita centra su atractivo en la posibilidad de contemplar la naturaleza en todo su esplendor.
Pero ello no es todo, sino que en La Islita nace un paseo de 6 Kilómetros que se va internando en una vegetación cada vez más salvaje, hasta llegar al paraje conocido como "El Arroyón", donde la naturaleza es la única protagonista del paisaje.
Paraíso del Ecoturismo, La Islita ofrece aventura, purificación, satisfacción y relax.